A Josué nos lo subieron directamente desde urgencias. “Está rojo por todo”, nos dijeron por teléfono. Y así era. No fuimos capaces de encontrar ningún trozo de piel de color medianamente normal. Intentamos averiguar cuándo había empezado el problema, pero Josué tenía otros problemas aparte de los de salud, y no era fácil mantener la conversación. Vivía en la calle desde hacía muchos años, tenía una hepatitis C crónica (hace algunos años de esto, no disponíamos de los actuales tratamientos), tenía 49 años, aunque aparentaba unos cuantos más, y la vida no le había tratado bien. Hacía años que arrastraba problemas de piel por los que nunca había consultado, así que no tenía un diagnóstico, pero nos explicó que se le formaban unas placas rojas que se le pelaban con escamas gruesas, sobre todo en las extremidades, a veces en el tronco, y que siempre había tenido una caspa muy rebelde.
Ahora se encontraba mal, y aunque no tenía fiebre estaba destemplado, tenía escalofríos y estaba cansado, más de lo normal. En urgencias le habían sacado sangre y hecho una radiografía, le dijeron que se quedaría ingresado. Al menos comería ese día.
Las lesiones las podéis ver en las imágenes, así estaba por todo el cuerpo, incluida la región centro-facial y el cuero cabelludo. La piel, además del eritema intenso, estaba francamente engrosada, y en algunas áreas se formaban gruesas escamas. No palpamos adenopatías y también nos llamó la atención la afectación ungueal (en manos y pies). Las mucosas, palmas y plantas se encontraban respetadas. Se quejaba de picor, incluso de dolor en algunas zonas.
¿Os animáis a ponerle nombre? ¿Por dónde empezamos? Lo van a ingresar, así que ya podemos irle pidiendo pruebas, y quizá empezar algún tratamiento. El miércoles os cuento. ¿Os gustan las tormentas? Pueden ser fascinantes (siempre y cuando estés a cubierto).
UKKO | Storm-lapse from Riku Karjalainen on Vimeo.
Ahora se encontraba mal, y aunque no tenía fiebre estaba destemplado, tenía escalofríos y estaba cansado, más de lo normal. En urgencias le habían sacado sangre y hecho una radiografía, le dijeron que se quedaría ingresado. Al menos comería ese día.
Las lesiones las podéis ver en las imágenes, así estaba por todo el cuerpo, incluida la región centro-facial y el cuero cabelludo. La piel, además del eritema intenso, estaba francamente engrosada, y en algunas áreas se formaban gruesas escamas. No palpamos adenopatías y también nos llamó la atención la afectación ungueal (en manos y pies). Las mucosas, palmas y plantas se encontraban respetadas. Se quejaba de picor, incluso de dolor en algunas zonas.
¿Os animáis a ponerle nombre? ¿Por dónde empezamos? Lo van a ingresar, así que ya podemos irle pidiendo pruebas, y quizá empezar algún tratamiento. El miércoles os cuento. ¿Os gustan las tormentas? Pueden ser fascinantes (siempre y cuando estés a cubierto).
UKKO | Storm-lapse from Riku Karjalainen on Vimeo.